domingo, 8 de marzo de 2015

Nueva Zelanda: Isla Norte

Tras unas 6 horas de viaje desde Polinesia llegamos por la noche a nuestro primer destino en Nueva Zelanda: Auckland.
Recogemos las maletas, nos cargamos de folletos con toda la información para nuestras próximas rutas y ya están esperándonos Eva y Juanjo!!
Se hace raro ver a alguien conocido en un sitio tan remoto, también para ellos que después de 1 año y medio en Auckland, nosotros somos su primera visita. Es un momento especial porque ellos han sido los que nos han dado la idea de esta locura, ellos han hecho su vuelta al mundo en 2009 y no los vemos desde hace mucho tiempo.

Nos vamos a su casa, que será nuestro hogar también unos días. Viven en un barrio bastante cerca del centro, nos recuerda mucho a Inglaterra, casas bajas con sus jardines bien cuidados y bastantes zonas verdes.
Después de ponernos un poco al día, nos vamos para cama que estamos muertos del viaje y ellos tienen que trabajar al día siguiente.

Nos levantamos muuuy tarde, teníamos pensado dar una vuelta por Auckland pero al final nos pusimos a arreglar temas logísticos, publicar blog y se nos fue el tiempo. Siempre viene bien algún día entre medias para parar, descansar y preparar viaje. 
Con la ayuda de Juanjo y Eva organizamos nuestro mes por el pais de los kiwis.
Al día siguiente si que ya nos ponemos en marcha para  conocer la ciudad. 
Salimos a media mañana porque el día está regular y caminamos hacia el Monte Edén que queda relativamente cerca de casa. Es un volcán extinto desde donde hay unas vistas geniales de la ciudad y de toda la bahía, impacta ver un gran cráter tan verde en la cima.
Toda la zona de Auckland era antiguamente una zona vocanica por lo que todavia se pueden ver muchos craters de volcacnes ahora ya inactivos y cubierto de vegetacion.
 
De camino al centro pasamos por diferentes parques y jardines y vamos callejeando acompanados por la impresionante Sky Tower. Hay bastante vida en el centro y aqui al igual que en todo el mundo se estan preparando para la navidad, sera raro pasar estas fechas fuera de casa y con calorcito.

 




Recorremos tambien  la zona de los muelles de donde salen todos los ferrys que te llevan de Auckland a otros pueblos e islas cercanos porque la ciudad esta situada en una bahia
Allí en un banco comemos viendo los ferrys y el trasiego de la gente. 

Auckland es una ciudad muy cosmopolita, se ve gente de muchísimas nacionalidades distintas, aunque más bien pocos maories y sobre todo muchísimos asiáticos.
Realmente es como estar en Asia, no nos esperábamos tanta influencia asiática. Muchas tiendas son para ellos y la gran mayoría de restaurantes son de cocina asiática, los tienes todos...koreanos, filipinos, malayos, indios, japoneses, chinos, etc.
Aquí todo cierra relativamente pronto así que a las 17:00, nos pasamos a recoger nuestro coche de alquiler para los próximos días. Al día siguiente nos vamos unos días de excursión a la Península de Coromandel.
Primer contacto con coche conduciendo del revés y con cambio automático en este viaje, así que habrá que darse unas vueltas por la ciudad para acostumbrarnos a ir por la izquierda. Prueba superada, con un coche automático es mucho más fácil.
Recogemos a Eva y Juanjo y nos vamos de cena a un restaurante koreano, no podía ser de otra manera, con tanto asiático había que probar alguno. 
Gran cena charlando de la vida y los viajes ;), el tiempo pasa volando y mañana hay que madrugar.
Salimos temprano por la mañana hacia la Península de Coromandel. Son unas 2 horas y media en coche desde Auckland, la carretera es muy buena, pero hay bastantes curvas así que no se puede correr. 
A medida que te vas acercando a la península las vistas son increíbles, así que vamos parando en diferentes miradores y en las cunetas para hacer algunas fotos del paisaje. Además el día acompaña, está soleado y hace bastante calor.
Ya en la península nuestra primera parada es en New Chums Beach, una preciosa playa de arena fina y con unas vistas muy chulas de los islotes de enfrente. 


Un paseo y un remojoon de pies para tener el primer contacto con las aguas de Nueva Zelanda. Está fresquita, pero mucho mejor que en las Islas Cíes!!.

Desde aquí seguimos ruta hacia Cathedral's Cove, desde el parking un largo paseo entre grandes helechos y pajaros nos lleva a una playa impresionante, con distintas cuevas y formaciones rocosas. Para poder verla hay que tener en cuenta el tema de las mareas.Nos pasamos un buen rato paseando por la arena y haciendo fotos.

Nueva Zelanda no solo es montaña , las playas son también impresionante.
Después de Cathedral's Cove se nos hace noche, nos vamos a buscar donde dormir y sorprendentemente está todo bastante lleno así que conducimos hasta un gran pueblo cercano, Whitianga, y encontramos sitio en el On the Beach backpackers. Muy recomendable.

Al día siguiente amanece nublado y con lluvia, pero a pesar de todo cogemos los bártulos y nos vamos a seguir explorando la zona.
Nuestra primera parada es Hot Water Beach, en esta playa con marea baja la gente se lleva una pala y hace una bañera en la arena. Hay aguas termales bajo la arena en ciertas zonas de la playa, asi que mezclando esta agua calentita con el agua del mar se puede hacer un pequeño spa natural al aire libre.  

La marea baja para hoy era a las 5 de la mañana, y con el día que está no estábamos muy por la labor de madrugar, otra vez será.
Se pone a llover  bastante, pero ya que tenemos coche nos daremos una vuelta por la zona. De camino nos encontramos a 2 chicos haciendo dedo, van para Cook's Beach, 'ok! We can take you there'. Decidimos acercarles allí y de paso vemos esa otra playa.
Pero llueve tanto cuando llegamos que ni siquiera nos bajamos del coche. Los chicos dicen que se quedan pero cuando nos ven irnos se acercan para ver si los volvemos a llevar, jejejeje. Los dejamos otra vez en su hostel de Hot Water Beach. Mal día para ver playas...nos volvemos a Auckland.
El camino se hace largo, al principio mucha lluvia aunque a medida que vamos avanzando empieza a abrir. Comemos por el camino en un parque con vistas a un Pohutukawa en flor, son árboles autóctonos que florecen en verano en las zonas costeras dando al paisaje un espectacular color rojo. Dentro de unas semanas estarán todos en flor, a ver si  podemos verlos en su esplendor.
Llegando a Auckland nos coge un buen atasco, no nos hemos dado cuenta que es hora punta en la ciudad y llegamos por los pelos a devolver el coche a la agencia.....menos mal que volvíamos con tiempo.
Nos volvemos para casa dando un paseo por el centro y viendo escaparates, aunque aquí estan entrando en el verano, en menos de un mes sera Navidad, así que aquí también tienen las tipicas decoraciones navideñas mas acordes a lugares con algo más de frío.
Hemos quedado con Juanjo y Eva para salir a cenar, hoy la elección es Burguer Fuel, una hamburguesería gourmet en el barrio. Muy buena la cena y  acompañada de un variado de cervecitas locales mucho mejor. Aquí hay mucha variedad de cervezas artesanas así que estamos en nuestra salsa.

A la mañana siguiente nos levantamos todos temprano, es sábado y nos vamos juntos a pasar el finde. La idea inicial era ir al Parque Nacional de Tongariro, pero el tiempo está fatal en esa zona, así que cambio de planes y nos vamos a la costa noroeste de la isla norte, a la Kauri Coast.
El viaje es largo, pero muy entretenido, las vistas desde el coche son muy buenas, y vamos charlando sobre Nueva Zelanda y cotilleando sobre muchos otros temas porque toca ponerse al dia
Los guías que llevamos son de primera ;), y de camino vamos parando en algunos miradores desde donde podemos ver vistas preciosas de la costa y algunos Pohutukawas en flor.
En uno de estos árboles a lo lejos vemos un montón de pájaros y bajamos a explorar, se trata de un montón de Tuis jugueteando y revoloteando. Los Tuis son pájaros típicos de este país y su canto es muy peculiar.
Seguimos ruta ya que el camino es largo y queremos hacer un par de caminatas antes de que anochezca.
Aparcamos en el punto info del parque y desde allí empezamos la primera caminata hacia un mirador. Vamos siguiendo un sendero por el medio del bosque donde podemos ver los árboles y los pájaros típicos de la zona. Vemos árboles de Manuka y Hanuka, muy similares, de hojas pequeñas y propiedades antisépticas, con Manuka se hace una miel de muchísima calidad y muy apreciada por sus propiedades, y que por cierto vale una pasta.
Vemos otros arboles como los Rewarewas, y también helechos de diferentes tipos como el Silver Fern, que es fácil de identificar por que tiene un color plateado por el envés de las hojas, y es la planta nacional del país y el símbolo de los famosos All Blacks. Aquí los helechos son gigantes.

Pero los auténticos protagonistas son los Kauris, árboles que solo existen en la isla norte de Nueva Zelanda y en algunas zonas de Australia. Pueden llegar a vivir miles de años y crecen muy rectos y muy anchos, y los más longevos son arboles sagrados para los maories. Ahora están muy protegidos, no se pueden talar y cuando entras en un bosque de kauris tienes que limpiar bien tus botas para no contaminar los suelos. Sin embargo antiguamente eran muy utilizados, sobre todo para construir canoas.
A lo largo de esta caminata vamos viendo kauris de diferentes tamaños, y ya algunos bastante grandes.
También pudimos ver gran variedad de pájaros, y escuchar diferentes cantos. Interesante fue ver la paloma gigante llamada kereru.
La verdad es que hacer algo así con Juanjo y Eva es un auténtico lujo, conocen muy bien toda la fauna y flora,  así que es como llevar a dos guías profesionales al lado.

Bajamos y cogemos el coche al inicio de otra ruta. Esta ruta recorre una zona de bosque donde están algunos de los kauris más longevos del país.
Son impresionantes, gigantes y te hacen pensar durante todos estos siglos todo lo que habrán visto y vivido, y allí siguen, impasibles, presidiendo el bosque, los dioses del bosque. Alucinantes!!!!
El más antiguo tiene unos 2000 años y un diámetro de 3 metros, se necesitan 8 personas para rodearlo.

Nos quedamos a dormir en una cabina de un Holiday Park cerca del bosque, en una zona típica para avistar kiwis, ya tenemos plan para esta noche.
Después de la caminata estamos hambrientos, nos hacemos un poco de pasta que acompañamos con una botella de Pinot Noir neozelandés y ya estamos listos para salir a avistar kiwis.

Vamos preparados con nuestras linternas de luz roja y los oídos bien abiertos. 
Los kiwis son aves nocturnas muy difíciles de ver y muy asustadizos, así que se debe ir caminando despacio y sin hacer mucho ruido. Hay que ir atentos por si se les oye mover hojas o si se oye su peculiar canto de llamada.
Entramos en la ruta donde hay posibilidad de verlos y vamos andando despacio entre el bosque, y al poco de llegar les empezamos a escuchar. Parece que hay 2 o 3, pero están bastante lejos. Seguimos caminando, escuchamos a los kiwis pero sin rastro de ellos. 
Al igual que nosotros, nos cruzamos  con otra gente que también ha salido con sus linternas rojas, pero sin suerte. 
A pesar de ello ha sido una caminata nocturna muy divertida, lo pasamos estupendamente y tuvimos la suerte de ver nuestros primeros 'glow worms', gusanos luminosos que quizá os recuerden a los famosos "gusiluz". Son muy chulos y lo que ves es como un pequeño cielo estrellado, una pena que sean difíciles de retratar.

Finde exprés y nos volvemos para Auckland con las paradas justas porque el camino es largo y nosotros esta misma tarde nos cogemos un coche de alquiler para seguir conociendo la isla norte.
Eso si, aprovechamos para hacer la compra por el camino porque en este país es muy común que la gente ponga en la puerta de su casa un chiringuito con la producción de sus huertos que le sobra o incluso huevos o miel.
Paras, coges lo que quieras y le dejas el dinero correspondiente en una hucha. La gente aquí es de fiar y confían en la gente.....no se yo si en España funcionaría este sistema.
Nos llevamos para casa kumaras (patatas típicas de este país) y aguacates......mmmmm que rico.
Ya cerca de Auckland paramos en la playa de Muriwai, una playa larguísima de arena volcánica con un viento infernal y por ello llena de gente haciendo kite surf y surf. 
También por el viento acuden a anidar allí los alcatraces. Necesitan de las corrientes de aire para poder levantar vuelo y es impresionante verlos planear. 
Justo ahora se puede ver allí una colonia enorme en plena época de cría, hay miles, son enormes y con unos colores muy llamativos.
Anidan todos juntos en una zona relativamente pequeña, pero todos colocan el nido equidistante al del vecino para no molestar. Todo un espectáculo!.

Desde aqui y sin tiempo para mucho mas nos vamos al aeropuerto a recoger nuestro Nuevo coche de alquier para los proximos dias. Nos despedimos de nuestros anfitriones hasta dentro de 3 dias que volveremos a Auckland para volar a la isla sur.

Es tarde y se hace pronto de noche pero vamos haciendo camino hasta Rotorua, llegamos muy cansados después de un día intenso de mucho coche.... nos vamos a dormir.

Al día siguiente amanece bastante gris y nos vamos a recorrer la ciudad. Rotorua es curiosa por su gran actividad termal, tiene unos jardines donde se pueden ver distintas fumarolas, barros burbujeantes y aguas termales. Aprovechando esto, tienen montadas unas pozas de uso público donde puedes pasar un buen rato con los pies a remojo en aguas termales bastante calientes, una maravilla!!
La ciudad también esta llena de balnearios privados. En los siglos de la colonización inglesa se convirtió en la gran ciudad de relax y vacaciones para los ingleses, y se crearon varios balnearios de superlujo, muchos de los cuales algunos siguen en activo y otros se han reconvertido en museos.
Huele un poco a azufre (o a huevos podridos) por todas partes, es lo que tiene la actividad termal...
Es sorprendente caminar por la ciudad  y ver grietas en el suelo por las que sale agua hirviendo o humo...la actividad volcánica es intensa y a veces eso da un poco de mal rollo.
Escapando de los chaparrones como podemos, seguimos con nuestro paseo y nos acercamos a una Marae, centro de reunión de la comunidad maori. Esta es una de las zonas de Nueva Zelanda donde hay mayor presencia de maoris y donde todavía se pueden ver algunas de estas aldeas, aunque ahora más orientadas al turismo. 
La casa de reunión está pintada de colores rojos, blancos y negros con incrustaciones de nácar de Peua, una concha de color azul turquesa similar a la oreja de mar, muy representativa de Nueva Zelanda. La casa tiene una gran arco con símbolos maories que siempre representan la entrada a lugares públicos o de reunión por lo que este tipo de arcos lo puedes ver en algunos colegios, cementerios y otros lugares.
Justo en frente la iglesia y el cementerio con decoración también maori con lo que se puede ver otra vez aquí la fusión de las dos religiones como en Isla de Pascua....esto es lo que tiene la evangelización.
Muy cerca se encuentra la zona de balnearios y por el tipo de construcción ya te das cuenta que pertenecen a la colonización inglesa. 
Impresionantes edificios rodeados de jardines donde puedes ver pukekos paseando libremente, en España conocidos como calamones. Se podría decir que son como las palomas pero estos son muchísimo mas bonitos y simpáticos. Estos pájaros son bastante comunes en Nueva Zelanda y es también uno de los muchos símbolos del país ya que en muchas zonas te puedes comprar souvenires con su imagen.
Tanto pasear, incluida alguna que otra carrera escapando de los chaparrones, nos ha dejado muertos, así que nos volvemos al hostel que tiene una pequeña piscina de agua termal....plan perfecto para terminar el día.

Seguimos con la idea de hacer el Tongariro Crossing, una de las grandes rutas de trekking de Nueva Zelanda, que son unas 8 horas de caminata, con vistas impresionantes de los volcanes Tongariro y Ruapehu...pero la previsión de tiempo  es de mucho frio y lluvia por lo que decidimos cambiar los planes.
Salimos temprano por la mañana hacia el parque de Tongariro para hacer una de las caminatas cortas de un par de horas, y la verdad que aunque hace frio, cuando llegamos vemos salir el sol  y podemos disfrutar de esos paisajes áridos que fueron elegidos para representar a Mordor en 'el señor de los anillos'.


De vuelta pasamos por el lago Taupo para comer tranquilamente con vistas a las orillas del lago. Y después de comer nos acercamos a 'Spa Thermal Park' para disfrutar de las aguas termales de la zona. 
En este caso la zona es muy curiosa porque hay una fuente termal de agua muy muy caliente, que llega a un río así que al mezclarse se templa, y según la zona del río donde te pongas tienes diferentes temperaturas. Allí estuvimos un buen rato compartiendo 'balneario' con locales, mochileros y turistas asiáticos.
Aun nos queda una tirada hasta Rotorua así que nos volvemos directamente.

Último día de  nuestro corto viaje y nos levantamos temprano para visitar Wai-O-Tapu, una especie de parque natural termal, por definirlo de alguna manera, donde hay una gran actividad volcánica.
Siguiendo una serie de rutas se pueden ver diferentes fenómenos termales, como un gran geyser, lagos termales de diferentes colores en función de los contenidos minerales, fumarolas de todo tipo y barros burbujeantes espectaculares.

Lo más parecido al infierno en la tierra que uno se pueda imaginar, es curioso y muy interesante de ver.


Después de la visita al infierno, cogemos el coche y nos acercamos a la zona de los lagos proximos a Rotorua para comer en plan picnic con vistas al lago. Bastante contraste de zonas a pesar de estar tan cerca, del rugir del infierno a la calma y el relax del lago.

Nos volvemos a Auckland sin prisa pero sin pausa y nada más llegar preparamos unos bocatas y unas cervecitas, para salir hacia Devonport en cuanto llegue Juanjo del trabajo. 


No nos podíamos ir de la ciudad sin ver el skyline así que nos vamos a la península que esta justo en frente de Auckland, para ver el atardecer y poder ver la ciudad con sus luces. Genial despedida para Auckland!


Mañana temprano nos vamos a la isla sur!!!
Gracias a nuestros anfitriones la isla norte nos ha encantado, veremos si la isla sur está a la altura!!!!



Información viajera

Al recorrer el pais en coche, prácticamente cada día y cada noche estuvimos en un lugar diferente, asi que solo vamos a detallar los mas recomendables.

Rotorua Central Backpackers: buen hostel, bien situado y con muy buenas instalaciones, incluyendo una pequena banera de agua termal de uso libre.
Waiotapu Thermal Wonderland: una buena manera de ver concentrado en 3-4 horas de paseo todos los fenomenos volcánicos y termales de la zona. Es interesante, aunque no es barato, pero en nuestro hostel y en algunas revistas dan descuentos del 10%.

Consejos viajeros

Nueva Zelanda es un país muy dedicado al turismo, sobretodo al turismo de naturaleza y lo tienen muy bien montado. Te lo hacen todo muy fácil.
Información turística en cada pueblo, con guías y folletos supercompletos; baños públicos limpios en cualquier sitio; barbacoas a gas gratuitas en sitios como playas, lagos y parques (una gran idea).

Nosotros al poco de llegar nos cogimos una tarjeta de prepago con numero de telefono kiwi ya que al ir en coche vas más sobre la marcha y los hosteles no tienen recepción 24 horas. Siempre viene bien llamar antes para reservar o avisar que llegarás tarde. Dependiendo de la época te puedes encontrar sin sitio para dormir en algunas zonas.
Nos cogimos la tarjeta de 2degree gratuita que puedes encontrar en el aeropuerto y la recargamos con un paquete de llamadas e internet para un mes que nos costo unos 11 euros.
La red en algunas partes del país no es del todo buena pero puedes buscar otra compañía con mejor red, aunque seguramente tengas que pagar 5 dolares por la tarjeta prepago.

En cuanto a los alquileres de coche o campervan decir que hay un sin fin de empresas y variedad para todos los gustos. Los alquileres son baratos y la gasolina ronda los precios de España, eso sí el truco está en que cuantos mas días lo alquiles mas barato te sale (para la mayoría de compañías) y algunas empresas suelen hacer ofertas puntuales.
Pero ya el chollo de los chollos son los 'relocations', algo muy común en este país al igual que en Australia, Estados Unidos o incluso Inglaterra donde los alquileres de coches están a la orden del día.
El sistema consiste en que las empresas de alquiler de coche necesitan mover coches entre las ciudades principales, y en lugar de pagar a alguien que lo haga, lo anuncian en sus webs. Te cobran solo un precio simbólico de 1 dólar al día y algunas veces te regalan un depósito de gasolina, o los billetes de ferry si el tramo que tienes que hacer implica cruzar las islas.
Son ofertas puntuales, así que hay que estar atento porque se suelen agotar muy rápido.

Con un turismo tan de carretera la aplicación Campermate es imprescindible. Esta dedicada principalmente a la gente que viaja en campervan (autocaravana) pero la información que contiene es valida para cualquier viajero en la carretera. Mapa offline que te indica desde una zona de camping, un baño público, un supermercado, una red wifi gratis y mucho más. La aplicación de 10.
En un país con el clima tan cambiante esta bien tener de mano la web meteorológica del estado que dentro de lo malo aciertan bastante y es de fiar.
http://www.metservice.com/national/home